Hace unas semanas, parte del equipo de Picking Málaga tuvo la suerte de visitar las nuevas instalaciones de Balfegó, nuestro proveedor de confianza de atún rojo. Fue una experiencia increíble que queremos compartir con vosotros, porque conocer de cerca el trabajo que hay detrás de este producto nos reafirma en algo que ya sabíamos: estamos colaborando con los mejores.

Unas instalaciones únicas en el mundo
Las nuevas instalaciones de Balfegó están en L’Ametlla de Mar, Tarragona, y son sencillamente impresionantes. Se trata de un complejo de 12.000 metros cuadrados que sustituye al anterior, destruido por un incendio en 2018. Este nuevo centro no solo es más moderno, sino que se ha convertido en la planta de procesamiento de atún rojo más avanzada del mundo.
Desde el momento en que entramos, nos llamó la atención la tecnología, la innovación y la organización del espacio. Todo está pensado para garantizar la máxima eficiencia y seguridad alimentaria, pero también para trabajar con el mayor respeto posible hacia el producto y el entorno marino.


Compromiso, calidad y sostenibilidad
En nuestra visita pudimos ver todo el recorrido que sigue el atún: desde que se captura hasta que está listo para enviarlo. Todo el proceso está trazado al milímetro. Gracias a un sistema de trazabilidad único, puedes saber exactamente de dónde viene cada pieza, cuándo fue capturada, cómo se crió y por dónde ha pasado hasta llegar a tu cocina.
Este nivel de compromiso con la sostenibilidad y la transparencia es algo que valoramos muchísimo en Picking Málaga. Por eso confiamos en Balfegó: porque comparte nuestros valores y apuesta, como nosotros, por la calidad sin atajos.


Atún rojo que inspira creatividad
Otro de los espacios que más nos impresionó fue su centro de experimentación gastronómica, un lugar dedicado a la innovación culinaria con el atún rojo como protagonista. Aquí, chefs, cocineros e investigadores pueden probar nuevos cortes, técnicas y recetas.
Tuvimos la oportunidad de ver demostraciones en vivo y comprobar cómo se fusiona la tradición japonesa con la creatividad de la cocina internacional. Este espacio es una muestra más de cómo Balfegó no solo cuida el producto, sino que también impulsa la cultura gastronómica a su alrededor.
Volvimos a Málaga muy orgullosos de contar con un proveedor como Balfegó. Para nosotros, no solo es garantía de excelencia, sino también de futuro, de sostenibilidad y de pasión por hacer las cosas bien.

